El poder curativo de la naturaleza: cómo salí de la depresión y puse mi trasero en marcha

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Seamos realistas, la mayoría de nosotros vivimos una vida con lujos que nadie ha tenido nunca y eso nos ha debilitado. Todo, desde aire acondicionado, automóviles, dispositivos electrónicos y lugares para comer, ha hecho la vida más fácil y conveniente que nunca.

Tenemos teléfonos móviles con tecnología de transbordadores espaciales, tabletas, sitios de citas en línea, servicios de plan de comidas que le llevarán la comida a su casa, entre una gran cantidad de otros productos comunes de hoy en día … ¿y sabe qué?

¡LA GENTE ESTÁ MÁS DEPRIMIDA AHORA QUE NUNCA!

Quizás lo tengamos demasiado fácil hoy en día. ¡Quizás vivamos nuestros días sabiendo que pasamos más tiempo distraídos con tonterías que viviendo la vida!

Mira, yo también he estado allí. A pesar de ser una personalidad en línea y representar «lo bueno» en el estado físico y la nutrición, lucho con las mismas cosas que otras personas hacen con regularidad. Para empezar, trabajo en línea, por lo que muchas veces reviso los correos electrónicos en mi teléfono.

He sido víctima de enviar mensajes de texto mientras conducía como otras personas. He sido víctima de no salir tanto como debería cuando hace un buen día afuera, o de decirme a mí mismo que no puedo divertirme porque no puedo perder una pequeña fortuna. No soy diferente de lo que muchos de ustedes pueden ser, solo estoy escribiendo sobre eso.

Paso por períodos en los que no siempre soy tan alegre como debería ser, como lo hacen muchas otras personas … se llama vida, estrés y responsabilidades.

¡NO HAY NADA QUE LE DEJE DE SALIR!

Siempre me ha gustado pasar tiempo al aire libre. Cuando era niño, algunos de mis amigos y yo vivíamos a unas 3 cuadras de una presa gigante. Recuerdo haber pasado varios veranos en bicicleta hasta esa presa con mi caña de pescar en una mano y una pequeña caja de aparejos o cebo en la otra.

Pasábamos todo el día allí. Pescábamos, exploramos las orillas del río, comíamos bocadillos y ocasionalmente hacíamos cosas que se suponía que no debíamos hacer (mirar revistas pornográficas, fumar cigarrillos, encender bombas de piña (un fuego artificial que te volará las manos).

Esa estúpida presa brindó algunas de las mejores experiencias de mi vida mientras crecía y nos dio algo que hacer durante todo el verano en los días en los que estábamos aburridos. En ese entonces no teníamos dinero y eso nunca nos detuvo.

Otro evento memorable fue andar en bicicleta alrededor del lago un día con un buen amigo mío de la infancia. El viaje fue de aproximadamente 40 millas de largo y tenía alrededor de $ 5. Mi almuerzo consistió en una bolsa de papas fritas calientes y un refresco de una gasolinera.

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NUNCA UNA VEZ EN MI MENTE DIJE «NO PUEDO HACER ESTO PORQUE NO TENGO SUFICIENTE DINERO»

Ese paseo en bicicleta por el lago es uno de mis mejores recuerdos hasta el día de hoy. Recuerdo que bajé por colinas enormes donde el aire cambiaba y se sentía más fresco, me detuve a comer mientras estaba sentado en la acera con mi amigo, y el hecho de que realmente no sabíamos exactamente qué caminos tomar en un par de lugares, pero de alguna manera nos las arreglamos. para encontrar el camino correcto.

Una de las trampas comunes en las que muchas personas caen a medida que envejecen es la tendencia a complicar demasiado las cosas. Podemos entrenar nuestras mentes para que siempre nos digan «No puedo hacer eso por tal o cual …»

En lugar de utilizar lo que tenemos disponible, insistimos en el problema de no estar lo suficientemente preparados. No es diferente al culturismo y cómo algunas personas no hacen dieta ni van al gimnasio porque no tienen la pila de suplementos perfecta, el tiempo perfecto en el gimnasio o el pequeño gimnasio perfecto con todo lo que podrían imaginar para el equipo.

¡Insto a todos a salir de esta mentalidad porque no es más que esclavitud! Llega al punto en que te olvidas de cómo divertirte en la vida.

¡LA NATURALEZA ES SIN MISERICORDIA, PERO ES FOLLEMENTE REAL!

La naturaleza es despiadada pero es jodidamente real. Cuando salga a un sendero, puede recostarse y salir o continuar. No hay nadie que venga a salvarte o a tirarte un tampón y decirte que todo estará bien.

Una vez decidí ir a trotar por este bosque estatal. Me perdí y afuera estaba oscureciendo. La única forma de volver a mi coche era seguir corriendo y si quería volver antes, la única opción que tenía era correr más rápido.

Lo que originalmente estaba planeado para correr unos kilómetros a través de un bosque se convirtió en una caminata de 10 millas para encontrar mi camino de regreso al auto. ¡Mis piernas estaban más adoloridas al día siguiente de lo que creo que nunca en mi vida! Pero no me arrepiento porque ese día fue real y brutal para mí.

A veces, cuando sales y te embarcas en una aventura, te quitas todo el estrés. Pone la vida en perspectiva y te recuerda lo que es importante en la vida. ¡La vida no está destinada a ser aburrida, está destinada a la emoción y la grandeza!

No importa si no tiene las botas de montaña perfectas, la carpa más grande o el bastón de $ 100 de su tienda local de deportes al aire libre. Muchas de esas cosas son para personas que quieren «sentirse como» aventureros, de nuevo … ¡más que complicar el proceso!

Puede ir a cualquier tienda de segunda mano o a consignación y comprar estas cosas. Demonios, ¡incluso puedes alquilar estas cosas en lugares hoy en día!

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CÓMO SALIÉ DE LA DEPRESIÓN Y ME ENRIQUÉ EL CULO DE NUEVO

Nunca fui alguien que hubiera afirmado estar deprimido, pero pasé por un breve período recientemente en el que me encontré un poco deprimido. El problema provenía de una multitud de factores y dejé mi dieta por un tiempo y comencé a beber un poco más de lo que debería haber bebido.

Todos los años, mi familia tiene la tradición de ir a un huerto de manzanas y recoger manzanas. Hemos estado haciendo esto durante los últimos 5-6 años. Hay algunas tradiciones que siempre hacemos como familia cada año y me aseguro de que suceda pase lo que pase. Algún día esos viajes desaparecerán.

La noche antes de salir temprano a la mañana siguiente, consumí 14 cervezas. Me senté en mi porche bebiendo y pensando. Todos los demás dormían y yo seguía bebiendo. Sabía que la mañana siguiente iba a ser difícil, pero nunca he tenido una excusa para no pasar tiempo con mi familia.

Dormí unas 4 horas esa noche y salimos a la mañana siguiente para conducir 3 horas hasta las montañas. Mientras caminaba por el huerto, ¡sentí que el alcohol comenzaba a salir de mí!

Después de recoger manzanas, salimos a almorzar y luego nos adentramos en las montañas. No voy a mentir, tomé mucho café esa mañana para seguir adelante. Algunas de las carreteras por las que estaba conduciendo no son el tipo de carreteras por las que quieres salir, ¡porque vas a caer miles de pies antes de que el coche toque el suelo!

No tenía idea de adónde íbamos, simplemente seguí conduciendo por las montañas. Al igual que cuando era niño y no tenía idea de lo que me esperaba, empezaron a suceder cosas maravillosas.

El aire comenzó a enfriarse, estaba conduciendo a través de las nubes y, antes de darme cuenta, ¡estaba mirando las nubes! La única vez que miré las nubes antes fue en un avión.

Finalmente encontramos un parque estatal en la cima de la montaña y pensé qué demonios, así que conduje hacia allí. En el parque había un mirador que abría vistas probablemente a cientos de millas. Había senderos que recorrían el borde de la montaña. Había cuevas, un manantial natural, rocas de cuarzo y vistas impresionantes.

¡Las nubes pasaban a través de nosotros y podías sentir las gotas de agua en el aire mientras caminábamos por este sendero! De repente, el veneno había abandonado mi cuerpo desde la noche anterior. ¡No había ninguna cantidad de alcohol o sustancia que pudiera reemplazar lo que estaba sintiendo ese día!

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¡LA REALIDAD ES EL MEJOR ALTO QUE TENDRÁS SI SALES Y LA ENCUENTRAS!

A pesar de estar agotado por conducir, beber la noche anterior y caminar durante el día, sentí una sensación de rejuvenecimiento total por esa aventura. Después de regresar a casa esa noche, comencé a cocinar mis comidas durante los siguientes días. Me dije a mí mismo: «¡Iré al gimnasio a las 5:30 am mañana por la mañana, pase lo que pase!»

Me desperté temprano a la mañana siguiente sintiéndome increíble. ¡Los problemas que me molestaban parecían desaparecer y mi nuevo objetivo era destruirme de nuevo y planificar nuestra próxima aventura!

El límite de tiempo de 24 horas al día ya no me aplica tanto. La vida se ha convertido en días y tiempos ilimitados, y todo se ha entrelazado para lograr un objetivo tras otro mientras se encuentra la tranquilidad durante el proceso.

Puede tener éxito y alcanzar los puntos de referencia que se estableció, pero sin la tranquilidad de que estas cosas no tienen sentido. ¡Mira cuántas personas se distraen constantemente de la vida adquiriendo más y más mierda sin sentido! Nunca termina hasta que te das cuenta de que las mejores cosas de la vida son gratis.

Tampoco hay mejor sensación que la de recuperar una parte de ti mismo que puedes haber perdido en el camino. Ese día en esa montaña recuperé parte de mí. Recuperé la parte de mí que no siempre sabía lo que me esperaba, pero lo atravesé de todos modos, sin miedo.

Insto a cualquiera que lea esto a que nunca deje de explorar y viajar por lo desconocido. Te sorprenderá la sensación de bienestar y las experiencias que pueden surgir de ella.

Tómate un día para emprender una aventura. Solo levántate y hazlo, no cuestiones una mierda y no pongas excusas como todos los demás. Haz lo que nadie más está haciendo. Si ves un lago helado saltar y nadar, si ves una montaña, súbela, si está lloviendo a cántaros, ¡a quién le importa una mierda!

Todas las mejores experiencias de mi vida provienen de lo desconocido. ¡Fueron esos momentos en los que dije al diablo y lo hice!

La naturaleza es curativa. Puede ser brutal, a veces incómodo, pero al final siempre hay una recompensa.

La vida se parece mucho a la naturaleza, atraviesas lo desconocido y sigues haciendo trekking … ¡pero tienes que salir y hacerlo!

El poder curativo de la naturaleza: cómo salí de la depresión y puse mi trasero en marcha
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